Debido a las altas tasas de reincidencias y la superpoblación de cárceles y penitenciarias, los empleos para funcionario de prisiones están en aumento.
Los oficiales correccionales se encargan de supervisar y administrar los centros de encarcelamiento. Hacen valer las normas y reglamentos dentro las presiones. Mantienen la seguridad en las cárceles tanto de los reclusos, como el resto del personal.
Estos profesionales están a cargo de reclusos por tiempo parcial, mientras esperan su juicio, o indefinido, mientras cumplen la condena.
Su autoridad no se limita únicamente a las celdas, también a zonas externas, como la enfermería, áreas de visitas o en el tribunal.
El funcionario correccional es muy importante. ¿Te interesa esta profesión? ¿Te consideras apto? En esta publicación te enseñamos los tips para entrar a trabajar de seguridad en una cárcel.
Tabla de contenidos
¿Qué estudiar para trabajar de seguridad en una cárcel?
Para trabajar como oficial de cárceles, no se necesita un título profesional. Solamente preparación, formación académica y ser apto para trabajar en seguridad.
En un centro de formación, como esta academia funcionario de prisiones Madrid, recibirás capacitación enfocada a supervisar y manejar a los reclusos, cuidar las áreas de reclusión, hacer cumplir las normas dentro de la correccional y vigilar que los reclusos cumplan con sus deberes diarios.
A diferencia de lo que las personas se imaginan por funcionario de presiones, este empleado no es un individuo musculoso para intimidar a los reclusos. También debe manejar conceptos jurídicos, conductas humanas, habilidades psicológicas y aptitudes médicas.
Todo esto lo aprenderás en una academia de funcionario de cárceles. Te facilitarán un temario alineado a las exigencias de las prisiones para ocupar un puesto de trabajo en estas instalaciones de seguridad.
Pasos para trabajar de seguridad en una cárcel
Si sigues estos pasos, encontrarás trabajo como funcionario de seguridad de correccionales, penitenciarias o cárceles:
Apuntarte a una academia
Todas aquellas personas con aspiraciones a trabajar como funcionario en las prisiones tienen que apuntarse a una academia y obtener la capacitación que acredita tus conocimientos en seguridad de cárceles.
Hacer la oposición
Para encontrar trabajo como funcionario de seguridad de prisiones, deberás presentarte en las oposiciones que se convocan cada año. Estas se dividen en tres fases: una teóricas, donde deberás demostrar tus conocimientos en el sistema penitenciario, una valoración médica donde te examinarán para comprobar si eres apto para el trabajo y finalmente un curso selectivo con periodo de prácticas remuneradas.
Ganar experiencia
El paso final para trabajar de seguridad en una cárcel es adquirir experiencia en las prácticas y así avalar tu desempeño en el campo laboral. Aprovecha cada oportunidad para aprender algo nuevo y sobresalir entre el resto de los pasantes.
Mientras más experiencias ganes, más rápido ascenderás. Serás elegible para un puesto de trabajo en la cárcel que, no necesariamente, tiene que ser oficial o funcionario de celdas.
Requisitos para entrar a trabajar de seguridad a una cárcel
Los requisitos para entrar a trabajar de seguridad en una prisión dependerán del tipo de centro de reclusión –no es lo mismo un correccional de menores, que una cárcel de máxima seguridad– pero los más comunes son estos:
- Ser mayor de edad
- Ser ciudadano español
- No pertenecer a ningún grupo que atente contra los derechos humanos
- Haber aprobado la capacitación en una academia
- Tener buena condición física
- No tener ninguna condena por delitos
- Estar capacitado en el uso de armas y otros dispositivos de vigilancia
Tips al entrar a trabajar de seguridad a una cárcel
Cuando entres a trabajar como funcionario de prisiones, es importante que sigas estos tips para superar los desafíos:
- No entrar a habitaciones con reclusos si no hay cámaras de seguridad
- No hablar sobre tu vida privada con los reclusos
- Mantener la línea de funcionario-recluso
- Preguntar lo que no entiendes sobre las normas y reglamentos de las cárceles
- Hablar con tu familia para no aislarte del exterior
- No creer todas las historias de los reclusos
- Mantenerte siempre activo ante cualquier indicio o comportamiento extraño